Francia y Alemania concentran la mayor parte del mercado de la fitoterapia en Europa. A esto se suma que cada vez más médicos españoles, prescriben plantas medicinales o extractos de las mismas, en problemas relacionados con el autocuidado de la salud, la mejora del bienestar o trastornos que no requieren o en los que no están indicados medicamentos de síntesis, explica el Dr. Márquez, experto en fitoterapia. y comenta que es una buena noticia, porque señala que estamos saliendo del incomprensible desinterés del sistema sanitario hacia este terreno. Como prueba, dice que no existe una asignatura de fitoterapia en la carrera de Medicina, un vacío que ha dejado al intrusismo y secretismo. Refiriéndose a que muchos pacientes, creen que los médicos rechazan la fitoterapia, y ocultan que la utilizan. Esto supone un riesgo para la salud, porque las plantas contienen principio activos, lo que las hace ser terapéuticas y producen interacciones con medicamentos o bien estar contraindicadas en pacientes concretos.
El creciente interés de la población por la fitoterapia reflejado en 1 de cada 3
españoles declara que utiliza plantas con fines terapéuticos según una encuesta de Infito (Centro de investigación de fitoterapia) y la aparición de una lista de fitofármacos cada vez más larga, hace que el propio sistema sanitario no tenga ya reparos en declarar su deseo de actualizar y utilizar los conocimientos en este terreno.
En una iniciativa totalmente pionera en nuestro país, la propia Semergen (Sociedad española de médicos de atención primaria) ha firmado recientemente un convenio con Aboca, empresa de fitoterapia líder en Europa, para apoyar y difundir el empleo de plantas entre los médicos generalistas españoles.
Este convenio prevé cursos de especialización para médicos; estudios clínicos y observacionales; un master de fitoterapia internacional, e iniciativas para fomentar la colaboración entre médicos y farmacéuticos y desarrollar así una red sanitaria que pueda aportar ventajas para la población. Explica Massimo Mercati, director general del grupo Aboca. El proyecto pretende comprobar la eficacia y seguridad de los productos y Prevén cursos de formación para los farmacéuticos, visitas a farmacias y material técnico-informativo.
La medicina no solo implica curar enfermedades, debe ocuparse también de la necesidad del individuo moderno de vivir con salud y, por tanto, ser capaz de tratar trastornos que aparecen en condiciones de lo que se conoce como homeostasis; es decir, cuando un paciente sano señala un malestar o molestia que afecta a su calidad de vida.
El Dr. josé Luis Llisterri Caro, presidente de Semergen comenta, que justamente en ese terreno son interesantes los complementos a base de planta, que pueden tener acciones de apoyo al organismo. por supuesto, si queremos evitar la automedicación, alimentada por informaciones que la gente encuentra en internet sin ningún control de verificación. Los médicos debemos actualizar nuestros conocimientos biológicos comprobados de las plantas medicinales. En esto, deberiamos poder apoyarnos en farmacéuticos con formación actualizada en fitoterapia. De ese modo, médico y farmacéutico podrían garantizar que las plantas medicinales se utilizan correctamente. Esto no solo redundarían en el bien de los pacientes, sino en sistema de salud pública en general, por el ahorro que la fitoterapia puede suponer para la factura sanitaria.
Nos olvidamos a menudo de que gran número de medicamentos de síntesis contienen principios activos presentes en plantas medicinales, dice Teodomiro Hidalgo Sotelo, vocal nacional de oficina de farmacia del consejo general de colegios oficiales farmacéuticos. A la vez, mucha gente tiene la falsa creencia de que, por ser naturales las plantas carecen de efectos secundarios y son inocuas. Es una idea totalmente errónea. En realidad el uso de plantas requiere el asesoramiento de un profesional sanitario con la formación suficiente en fitoterapia. Sin un consejo especializado, sin conocer cada caso ni tener en cuenta el resto de medicamentos que esta tomando una persona, el empleo de plantas medicinales puede provocar serios problemas de salud. En ese sentido, el consejo del farmacéutico es de gran valor, porque es un profesional de la salud que ha estudiado y conoce las plantas y cuándo y cómo deben utilizarse.
El mundo de la investigación científica esta recuperando el universo de sustancia naturales para encontrar soluciones eficaces para la salud, dice el Dr. Llisterri. Este cambio obedece a una evolución del concepto de salud. En los países más avanzados, ese concepto está estrechamente relacionado con el de prevención y hábitos de vida sanos. La idea ahora es que los medicamentos deben ser utilizados solo cuando son verdaderamente necesarios. En los demás casos, se pueden utilizar sustancias vegetales, siempre junto con un estilo de vida y una dieta saludables.
Fuente: Estar Vital -Marisol Guisasola.
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